Un juez mexicano abrió el miércoles un plazo de cinco días hábiles para decidir si procede o no la retirada definitiva de cargos contra la turista española Ana María Ríos Bemposta, informó el abogado de la joven, Alvaro Alcocer.

La decisión la tomó el magistrado Alfonso García tras celebrar una "audiencia de ratificación" con la defensa y la fiscalía en la que ambas partes piden el sobreseimiento del caso.

"Todo está en los márgenes legales", explicó a la salida del juzgado el letrado Alvaro Alcocer, a quien acompañaba el cónsul honorario de España en Cancún, Javier Marañón.

Este último dijo que lo único que queda "es que el juez pase a papel y lápiz" la decisión final sobre el caso, que confía en que sea favorable para la joven.

Marañón dijo que el caso aún no esta cerrado porque falta que el juez emita la sentencia de sobreseimiento definitiva.

Según Marañón lo que queda "es la pura formalidad" puesto que con con la situación como está "el juez no tiene por qué decir que no" a una petición en la que coinciden la defensa y la propia fiscalía, parte acusadora del caso.

Ello posibilitaría la libertad definitiva de la joven y la devolución de una fianza de 1.600 euros (2.000 dólares).

La turista española Ana María Ríos Bemposta, de 26 años, fue detenida el 8 de octubre pasado en Cancún por tenencia ilícita de explosivos y de un artefacto de detonación cuando concluía su luna de miel en el Caribe mexicano e iba a volver a España.

La joven estuvo encarcelada en Cancún del 8 al 16 de octubre y permaneció en esa ciudad hasta el día 20, cuando el juez al cargo del caso, Alfonso García, le autorizó a regresar a España pese a que la causa seguía abierta.

La Fiscalía mexicana no ha encontrado por el momento pruebas que acrediten la responsabilidad en este caso de la joven, quien desde el principio nego ser del material encontrado en sus maletas por el personal de seguridad del Aereopuerto Internacional de Cancún.

"El caso será cerrado"

Por su parte, Ana María Ríos, anunciaba este miércoles que su caso quedará próximamente cerrado.

La joven, que por la tarde permanecía esperando en una cafetería próxima su domicilio a que le llamase el cónsul honorario de México, Javier Marañón, recibió la comunicación de que la fiscalía está de acuerdo en el sobreseimiento del caso.

En medio de la gran euforia de su familia, la joven, no obstante, todavía dice que espera tener el papel en la mano para sentirse totalmente libre, ya que falta la firma del juez y el documento llegará en unos días. Según Ana María, el cónsul le explicó que en una audiencia celebrada este miércoles en México, la fiscalía aceptó el sobreseimiento del caso, aunque todavía falta que

"Era la noticia que esperaba", subrayó la joven, que dijo que espera que el viernes o el martes que viene tenga el papel en sus manos.

Ana María, que indicó que hará una fiesta cuando disponga del documento oficial, anunció que ejercerá acciones legales contra la empresa mayorista con la que viajaron a Cancún y la propia Policía Federal Preventiva.

Acciones legales

"Aquí tiene que haber responsables que paguen por lo que cometieron", afirmó la joven a un grupo de periodistas, e insistió en que está "ansiosa" por recuperar su vida normal e incorporarse a trabajar en la peluquería que regenta.

Asimismo, exige una disculpa por parte de las autoridades mexicanas por lo que le ha ocurrido.

El esposo de la joven, Marcos Dasilva, mostró su alegría por la decisión judicial, si bien también estuvo escéptico. "Soy una persona que hasta que no lo veo escrito no lo creo".

Aseguró en tono irónico que la "moraleja" de todo el proceso es que "si te vas a México, vete sin maletas".

La pareja comentó a los periodistas que, además del trastorno que han pasado con la detención de Ana María cuando regresaban a España tras pasar su luna de miel en Cancún, han tenido que afrontar un gasto de unos 30.000 euros en concepto de abogados, burocracia y teléfono.